RCP: ¿Cómo aumentar la efectividad de la práctica?

¿Cómo podemos garantizar efectividad al momento de brindar un masaje cardíaco y ventilaciones dentro de lo que se conoce como la maniobra de RCP?

Para aumentar la efectividad de la práctica de RCP es preciso mejorar el feedback y la formación continua, con la mejor experiencia de simulación.

El cuerpo humano adquiere habilidades con la práctica y para mantenerlas en el tiempo es necesario que se ejerciten en forma periódica. De esta forma, en este caso particular, se adquiere lo que denominamos la “memoria muscular” necesaria para realizar la intervención de una manera efectiva, y se busca que el cuerpo la mantenga por períodos prolongados realizando ejercicios de simulación en una rutina de formación continua.

En primera instancia, se puede suponer que la práctica con cualquier simulador cubre las expectativas. Sin embargo, la parte crítica para que nuestros músculos puedan adquirir esta memoria es la devolución que uno recibe del simulador en el mismo momento que realiza las compresiones o la ventilación. Este correcto feedback permitirá que quien se esté entrenando pueda autodirigir su práctica, corrigiendo en forma inmediata los distintos aspectos que determinan la eficacia de la técnica: frecuencia, profundidad de compresión y ventilación, retroceso del tórax, entre otros importantes aspectos. En resumen, logramos crear de esta manera un circuito eficiente de aprendizaje.

Si bien la información visual o auditiva impactará de una forma sencilla e inmediata en nuestro comportamiento, es sumamente importante poder tener información certera de todos estos parámetros a través de datos concretos, que permitan realizar una evaluación integral totalmente objetiva y corregir las desviaciones que surjan.

Tan importante es la retroalimentación en tiempo real que actualmente los más reconocidos dispositivos de asistencia incluyen la medición de los parámetros significativos para cuando nos exponemos a casos en nuestra práctica.

Bien lo indican las directrices sobre reanimación cardiopulmonar y atención cardiovascular de la AHA: la calidad del RCP puede representar la diferencia entre la vida y la muerte. La selección adecuada de los recursos de formación permitirá definitivamente aumentar la tasa de supervivencia y la calidad en nuestra atención.

Conocé el reconocido feedback de colores que ofrece SmartMan y todos los datos que permite registrar para un entrenamiento integral y efectivo en QRCP.

¿Cuánto demorás en tener una tomografía 3D de tu cuerpo?

El sistema EOS capta imágenes de cuerpo completo del paciente en un tiempo récord entre los sistemas actuales. Al simplificar el proceso, EOS consigue disminuir los tiempos del paciente frente a la radiación y acelerar el trabajo en las salas de rayos.

Imagen 3D de alta precisión

Con EOS se obtienen dos imágenes del paciente, una lateral y una antero-posterior de alta definición que permiten a los profesionales trabajar con seguridad en sus diagnósticos.

Gracias al sistema de escaneo continuo de EOS se evitan dos inconvenientes típicos de las tomografías: los problemas de stitching (discontinuidades en la composición de imágenes) y las distorsiones verticales, ya que trabaja con imágenes en escala 1:1.

El paciente se posiciona parado o sentado dentro de la cabina de EOS y el sistema de detectores patentado, crea una imagen de cuerpo entero en posición de bipedestación en menos de 20 segundos para un adulto y en menos de 15 segundos para un niño.

¿Cómo lo hace?

Mientras el paciente está parado o sentado, un mecanismo vertical mueve un brazo en C a lo largo de la altura del paciente o sobre alguna porción específica. Este brazo sostiene dos sistemas de imágenes que realizan las adquisiciones frontal y lateral e inmediatamente, las imágenes están disponibles en la estación de trabajo.

En tan sólo 20 segundos o menos, se obtienen dos imágenes radiográficas digitales de cuerpo completo del paciente. Sin “stitching” de imágenes y sin la necesidad de utilizar CDs o sistemas físicos de almacenamiento, EOS reduce el tiempo de espera del paciente y los tiempos de trabajo logrando realizar el examen completo en 4 minutos, incluso para estudios de columna complejos.

 

Mejorá las prácticas de pediatría con simulación

La práctica de la medicina es una vocación sumamente compleja y en pediatría se manifiesta en mayor medida debido a las diferencias fisiológicas que presentan los pacientes por la fragilidad y la falta de desarrollo de su cuerpo.

El avance en técnicas de diagnóstico y terapéuticas, junto con las innovaciones en el equipamiento y los protocolos de atención generan múltiples beneficios, aunque también implican mayores riesgos para la seguridad de los pacientes.[1]

También sucede que, en algunos servicios, el número de niños que son asistidos constituyen solo un pequeño porcentaje del total de pacientes. Por lo que son reducidas las posibilidades de empleo de algunas técnicas, mientras que está demostrado que el conocimiento y las habilidades con el tiempo decaen sin la puesta en práctica.[2]

Actualmente, los niños representan un 26% de la población a nivel mundial, mientras que en nuestro país la población infantil hasta los 14 años representa un cuarto de nuestros habitantes (datos de INDEC y UNFPA[3]) que son atendidos en las más de 4.000 instituciones de salud que cuentan con la especialidad[4].

Tal como ha sucedido con otras actividades, como la aviación comercial, la minería, la energía nuclear o las fuerzas armadas, el área de la salud ha comenzado el camino para formar sus profesionales de una manera más eficiente a través de la simulación.

El objetivo más importante que se busca con esta técnica es darle continuidad a la práctica para adquirir una habilidad.

Otra de las ventajas que presenta la simulación es la posibilidad de enfrentarse situaciones poco comunes. Se pueden desarrollar actividades en equipos de trabajo interdisciplinarios, donde la comunicación es el factor esencial, reconocer diferentes casos y y ejercitar el razonamiento crítico bajo condiciones inusuales.

El énfasis en la implementación de estrategias que permitan garantizar la calidad de atención en salud de los niños desde el nacimiento está presente en políticas y programas como SUMAR o el PROSANE. Sin embargo, para alcanzar el éxito en este tipo de acciones es necesario que se le pueda sumar la formación adecuada del recurso humano que las implementa.

Algunos centros de referencia han sido los pioneros en sentar bases para el entrenamiento no solo de sus profesionales, sino también de los padres de los pequeños para poder brindarles cuidados y una primera atención.

Desde los últimos años hasta la actualidad existe un incremento en los recursos y soluciones integrales para facilitar este tipo de formación con simuladores neonatales y pediátricos. Esto debe inspirar y colaborar a que la formación a través del uso de herramientas de simulación en esta área apasionante se convierta en una prioridad, para poder garantizar calidad de atención y seguridad a los más pequeños.

[1] http://www.analesdepediatria.org/es-la-simulacion-pediatria-revolucion-formacion-articulo-S1695403310002158

[2] Barbara Aehhlert, Pediatric Advanced Life Support, 2007

[3] https://www.unfpa.org/es/data/world-population-dashboard

[4] https://sisa.msal.gov.ar/